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Pilar Geijo: «Ser la mejor no siempre significa ser la número uno”

Pilar Geijo, tricampeona mundial de aguas abiertas, se plantea nuevos desafíos

Pilar Geijo, tricampeona mundial de aguas abiertas, se plantea nuevos desafíos.A los 30 años, la atleta que nada pruebas de hasta 88 kilómetros quiere disfrutar haciendo lo que le gusta.

Ganar títulos, subirse a un podio, colarse entre los mejores. Para muchos deportistas de elite, esas son las motivaciones para trabajar sin descanso durante sus carreras. A los 30 años, Pilar Geijo tiene una mirada diferente. La nadadora argentina, quien en septiembre se consagró tricampeona mundial del Grand Prix de aguas abiertas, ya cumplió muchos sueños y objetivos que se había planteado cuando a los 15 decidió dedicarse de lleno a esta exigente disciplina. Hoy no son los resultados finales los que la impulsan a seguir entrenándose.

«Hace tiempo que hago esto por la satisfacción que me genera la actividad, la competencia y toda la preparación previa», le cuenta aClarín desde Australia, donde está realizando su pretemporada. «Este año, por ejemplo, nunca fue un objetivo ganar el título -confiesa-. Yo siempre entreno muchísimo y me preparo para ser la mejor. Pero ser la mejor no siempre significa ser la número uno».

-¿Entonces cómo explicarías lo que significó para vos consagrarte campeona por tercera vez?

-Cuando era más chica, había hecho una lista de cosas que quería ganar. El título estaba en esa lista y ya lo conseguí hace un tiempo. Entonces el placer que me da seguir ganando no tiene tanto que ver con el resultado en sí, sino con la satisfacción personal que me genera cada una de las carreras. Es algo muy personal, muy intrínseco, que trasciende un resultado. Es recordar cada una de las competencias que tuve que disputar para llegar a ser tres veces campeona del mundo y tener recuerdos muy agradables y muy buenos de cada una. Además, todo lo que conseguí el año pasado, con el Olimpia de Plata como broche final, tuvo un plus extra porque en 2013 estuve lesionada. Entonces haber podido volver a competir y hacerlo en el mejor nivel, fue un placer enorme.

Geijo, quien además de sus tres títulos tiene en su haber el subcampeonato mundial de 2012, afirma que lo que más disfruta del exigente circuito FINA, en el que las distancias de las competencias suelen variar entre 15 y 88 kilómetros, es la imprevisibilidad. «Las adversidades me divierten. Por eso prefiero las aguas abiertas a la pileta, porque son mucho más impredecibles, más estratégicas. Disfruto tener que resolver situaciones y el hecho de que sean distancias largas, ocho o nueve horas en el mar, en la naturaleza, con frío, lluvia y olas lo hace mucho más interesante», admite la porteña.

Para hacer frente a una competencia que suele llevar al límite de sus capacidades a los atletas, su personalidad siempre fue una aliada importante. «La mente es un complemento de lo físico. Si no estás entrenado, no hay preparación mental que valga, no vas a ningún lado. Pero es una parte importante de la competencia y yo siempre tuve bastante fortaleza mental. Soy muy perseverante y muy positiva. Es algo innato en mí y siempre me ayudó», explica.

-¿Con qué objetivos vas a encarar la temporada 2015?

-Mi mentalidad, como siempre, es hacer mi mayor esfuerzo. En 2014 significó el primer lugar, pero este año puede que no. Es muy lindo terminar primera y ganar, pero no es mi único objetivo, aunque siempre me preparo para ser la mejor.

Su visión tan personal de la competencia pesó más que otros factores a la hora de planear su calendario 2015, un año en el que los Juegos Panamericanos de Toronto aparecen como el gran objetivo de la mayoría de los deportistas. Pero Geijo se concentrará una vez más en el circuito mundial. «Es un camino u otro -circuito mundial o Toronto-, porque las fechas suelen coincidir. Yo ya participé en los Juegos Panamericanos de Río y de Guadalajara, y hoy elijo concentrarme en otra cosa -explica- En este momento de mi vida, tengo ganas de correr la distancia que más me divierte y en la que me mejor me siento. Tengo ganas de hacer lo que me gusta».