New Balance invertirá $ 45 millones para volver a fabricar zapatillas en la Argentina

La marca deportiva New Balance, que dejó el país en 2001 y reapareció tímidamente en 2010, quiere volver a instalarse con fuerza en el mercado argentino.

Hace seis meses, el empresario local Arturo Alacahan se quedó definitivamente con la licencia de la marca, a través de la adquisición de la firma Sport Icon, y junto a un socio invertirá $ 46 millones para producir en el país, abrir locales e importar lo que le permita el Gobierno.

En un ambicioso proyecto que incluye el compromiso tomado con el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, de exportar a la región, Alacahan desembolsará $ 25 millones en productos y apertura de locales y $ 21 millones en expandir las fábricas donde hoy se produce la marca Kappa para incorporar calzado e indumentaria New Balance. Fabricará en Martinez y en el barrio porteño de Mataderos.

La marca es fuerte en el segmento de “running”, pero según el empresario, se focalizará en un mercado que crece más, el del “lifestyle” deportivo, esto es, la ropa deportiva para la vida cotidiana. Con la inversión, el empresario apunta a incrementar entre 30% y 40% anualmente la facturación, que asciende a los $ 80 millones.

El interés por fabricar en el país está motivado por la imposibilidad de importar. Hoy se verifican faltantes de varios productos deportivos de las principales marcas del mercado, inclusive, las que producen algunos modelos en el país. “Nos ajustamos a una restricción” reconoció Alacahan, quien, de todas formas, se mostró optimista. “Hoy el consumo está firme, y por las restricciones, el que tiene producto, lo vende”, aseguró, en la inauguración oficial del primer local exclusivo de la marca New Balance, que abrió hace dos semanas en Palermo.

Durante la década del ‘90 el licenciatario de New Balance era la empresa Gatic, que además tenía otras marcas emblemáticas, como Adidas, Umbro y Reebok. La firma comenzó a tener serios problemas financieros y terminó quebrando en 2004, pero antes, traspasó buena parte de sus activos al empresario Guillermo Gotelli.

En su mejor momento, New Balance llegó a vender un millón de pares anuales en el país, cuando el mercado general no estaba tan extendido.

Con la crisis de 2001 la marca había prácticamente desaparecido, y volvió en 2010, de la mano del Grupo Fimaes (Alberto Spagnolo y Guillermo Busso), Emiliano Fitá (presidente de Wanama y Cook) y José Da Silva Cardozo, representante de New Balance en Uruguay. Pero la empresa no dio los resultados que esperaban. Ahora, con el compromiso de producir en el país y exportar desde la Argentina, el presidente de New Balance, Alacahan, se embarca, también en la tarea de expandir la marca en locales exclusivos en shoppings.